Palm necesita un nuevo smartphones, y algo más

Palm está planeando un lanzamiento múltiple de productos para el próximo Consumer Electronics Show, quizás podría ser la última oportunidad de la empresa para sobrevivir en este competido mercado, recordemos que el evento se celebrará el próximo mes en Las Vegas.

Los dispositivos Palm se encuentran eclipsados en la actualidad por los productos de las diferentes empresas que dominan el mercado de los smartphones, por lo que las novedades son necesarias, pero cabe la posibilidad que no sólo enseñen nuevos terminales, sino que presenten un nuevo sistema operativo junto al nuevo hardware.

Profundizando en las informaciones, se comenta que estará basado en Linux y su nombre en clave es Nova. La empresa ya ha realizado sus primeros acercamientos a Linux con sistemas como el cancelado Foleo.

Palm utiliza actualmente Palm OS y Windows Mobile en sus dispositivos. La idea parece ser crear una nueva familia de productos en torno a este sistema, que conviva con los Centro y Treo.

Es justo recordar que Palm inauguró la revolución de los ordenadores de mano con su Palm Pilot hace ya más de diez años, en lo que respecta a telefonía móvil, destacar el éxito de su serie Treo.

En los últimos años la empresa ha estado luchando por sobrevivir, no ha estado preparada para hacer frente a los dispositivos de RIM, Apple y Nokia.

Palm no está en situación de entrar en confrontación directa con RIM o Apple, pero es una realidad que el mercado de los smartphones va a crecer mucho durante el próximo año, y todas las empresas que se dedican a este sector pueden tener una buena oportunidad.

Durante los últimos 18 meses, Palm ha estado contratado a ex-trabajadores de Apple, gente como Jon Rubenstein, implicado en la creación del iPod, Lynn Fox, relaciones públicas de Mac o Paul Mercer, ingeniero de Apple.

Los directivos de Palm han tomado como ejemplo a Apple para salir de su negativa situación. Recordar que la compañía recientemente publicó los resultados financieros del segundo trimestre, presentando unas cifras un 40 por ciento por debajo de lo que los analistas esperaban.

Las primeras evidencias las encontramos en que no ha habido ninguna fuga de información con respecto a nuevos proyectos, ya sabemos que es parte de la cultura Apple mantener las cosas bien escondidas.

La buena noticia es que en los últimos días se está hablando mucho de la empresa, es algo que despierta curiosidad y hará que no pase desapercibida en el próximo CES, pero también es un arma de doble filo, ya que las expectativas pueden ser altas, y si su evento decepciona, puede ser aun más difícil salir de la situación en el futuro.

Vía: BusinessWeek