
Como tirarlo desde las alturas sin paracaídas… o sumergirlo en agua media hora. Bueno, siempre es con truco. Y el nombre de éste último es NeverWet, una interesante tecnología capaz de convertir a tú dispositivo en a prueba de agua.
Aplicado desde un spray con el que se rocía el objeto en cuestión (un iPhone en nuestro caso), NeverWet consigue repeler el agua y otras partículas líquidas de la superficie sobre la que se aplica, al crear una pequeña barrera de aire entre ambos elementos.
Sus desarrolladores de Ross Nanotechnology aseguran que NeverWet puede hacer lo mismo frente al chocolate, la mostaza, el ketchup o el aceite, e incluso han llegado a sumergir una pieza de metal en agua salada durante un año para comprobar después que seguía seca.
De popularizarse esta tecnología nuestros gadgets y dispositivos estarían a salvo de la lluvia y la humedad casuales.