
La historia nos recuerda a un buen número de antiguos videojuegos que aprovechaban la excusa del ya manido rapto de la novia del protagonista para conducir a este a un sinfín de aventuras a través de un mundo imaginario donde pasar una y otra vez por pruebas a los que pocos nos someteríamos, como apreciaremos en el siguiente vídeo.
Para conseguir nuestro objetivo tendremos que llevar a Hoggy a través de un buen número de pantallas con el fin de conseguir un número concreto de llaves que nos permitan acceder a nuevos niveles de juego. Para conseguirlas, basta con que nuestro personaje vaya pasando de una pantalla comiéndose toda la fruta que encuentre a su paso.
Lo cual, en algunas ocasiones, no será tarea fácil, debiendo resolver algún que otro pequeño puzzle, mezclando así destreza física y mental para completar todas las pantallas del videojuego.
El manejo no puede ser más sencillo, pues combina la pulsación sobre la pantalla táctil con el movimiento del dispositivo gracias a la detección realizada del mismo por el acelerómetro.